En la Antigüedad el tiempo se medía con relojes de sol. Lógicamente, en el hemisferio Norte la sombra proyectada por el fiel se desplaza hacia la derecha conforme transcurre el día. Dado que los relojes mecánicos se inventaron en Europa, en el hemisferio Norte, los fabricantes, para no confundir, hicieron que las agujas giraran en el mismo sentido que la sombra de los relojes solares, tradición mantenida a lo largo de los siglos.
Revista Anteojito N°1545, pp.34
18 octubre 1994
https://archive.org/details/RevistaAnteojito1545/page/n34/mode/1up
No hay comentarios.:
Publicar un comentario